Los veranos son muy largos. Las vacaciones infantiles de verano duran en España casi tres meses y resulta muy difícil para los padres saber qué hacer con los niños. No todos los padres tienen la suerte de poder dejar a sus hijos en el pueblo o en la Sierra con los abuelos. Para muchas familias, encajar los veranos es más difícil que hacer un puzzle en 3D.
Por eso, recurrir a los campamentos de verano, es una opción que se puede tener en cuenta. Existen diferentes tipos de campamentos y aptos para diferentes presupuestos y edades de los niños.
Campamentos de verano, hay muchos y la mayoría suelen tener lugar desde el comienzo de las vacaciones en el mes de junio hasta finales del mes de julio. Desafortunadamente, hay muy pocos campamentos durante el mes de agosto.
Principalmente podemos dividir los campamentos de verano en dos tipos:
Campamentos urbanos
Los campamentos de verano urbanos son aquellos que tienen lugar durante el día. Los niños duermen en casa. Lo normal es que se prolonguen desde las 8 o 9 de la mañana hasta las 3 de la tarde. Pero dependiendo del lugar, pueden durar algo más, hasta las 5 más o menos. Esto se debe al horario reducido de verano, y la facilidad de muchos padres de poder recogerlos en este horario.
Los campamentos urbanos tienen como ventaja que se desarrollan en espacios reducidos, como puede ser un colegio, un centro educativo o una academia, o un incluso un polideportivo. De esta forma, los niños están más protegidos y aceptan niños desde los 3 o 4 años.
Normalmente en estos campamentos se mezclan actividades lúdicas con talleres temáticos y deportes. Los centros especializados imparten también campamentos de verano en inglés, en francés o en otros idiomas.
Campamentos fuera de casa
Los campamentos de verano clásicos son aquellos en los que los niños pasan entre una y dos semanas conviviendo fuera de casa con otros niños de su edad. Suelen tener lugar en espacios privilegiados naturales como son la sierra y la montaña. En ellos se combinan actividades lúdicas con talleres, deportes y excursiones.
Los campamentos de verano han tenido el privilegio de haber sido objeto de innovación continua y existen todo tipo de campamentos temáticos.
Los más solicitados son los campamentos de verano en inglés. En ellos, los monitores suelen ser nativos y todas las actividades se desarrollan en ese idioma. Los campamentos en otro idioma son beneficiosos, incluso si transcurren en España. Además de que un campamento en España es bastante más económico que uno en el extranjero, tenemos que tener esto claro: la situación no varía mucho. Un grupo de niños está aprendiendo inglés con monitores nativos. En ambos casos (en España o en el extranjero) el niño apenas saldrá del campamento y por lo general estará rodeado de sus compañeros, que no son nativos y también están aprendiendo. Y ese es el cuadro, tanto si está en España como si está en Irlanda, por ejemplo.
También existen campamentos de equitación, de multiaventura, de baile, de gimnasia, incluso de temáticas tan educativas y medioambientales como la cetrería.
Los campamentos suelen acoger niños a partir de 4 o 6 años hasta los 16 años. La edad idónea para llevar un niño a un campamento infantil es bastante subjetiva, porque depende del propio niño: de su autonomía, su madurez y de sus ganas de participar. Nuestra opinión es que 4 años tal vez sea demasiado pronto, pero es una decisión que sólo son capaces de tomar los padres.
Los beneficios de los campamentos de verano son múltiples
- El niño adquiere independencia y autonomía
- Cambia radicalmente de ambiente y se conocen niños de otros barrios, ciudades o países
- Aprende de forma lúdica, ya sea un idioma o varias actividades
- Aprenden a convivir con otros niños y a respetarlos
- Comienzan a trabajar en equipo
- Al estar fuera de casa realizan tareas que de las que no están acostumbrados a responsabilizarse
A la hora de escoger un campamento de verano se han de tener en cuenta muchos factores diferentes:
- El presupuesto del que se dispone
- Entorno en el que se desarrolla
- Instalaciones
- Distancia de nuestra ciudad de residencia, ya que hay que ir a dejarlos y recogerlos
- Actividades que tienen lugar en el campamento. Está bien que el niño aprenda durante el campamento, pero seamos realistas. Se trata de sus vacaciones. Un par de horas de inglés a la semana, unos talleres de cocina o de manualidades, está bien e incluso son de agradecer. Pero una mañana entera de clases…puede no ser divertido. A nosotros no nos gusta llevarnos el ordenador a la playa y seguir trabajando, ¿verdad?
Ahora que lo sabes todo, ya puedes encontrar el campamento de verano que más se adecua a tus necesidades. ¡No dudes en compartirlo con nosotros!